Por: Yolanda Cortés Arredondo
EL DISEÑO CURRICULAR COMO FACTOR DE CALIDAD
Para poder mejorar la calidad educativa de los sistemas institucionales, esto solo se consigue mediante la elaboración en el diseño curricular y en todos sus elementos de los cambios, innovaciones y reformas necesarias para ello. Es necesario aclarar los conceptos y realidades que se nos ofrecen en el día a día de la práctica, docente, directiva, supervisora, para decidir como lograr esa calidad y a través de que medio podemos alcanzarla sin que se quede en buenas intenciones sin concreción en la práctica. Estamos desanimados de las reformas que se plantean y que se resumen en nuevas normativas que no llegan nunca al aula, y que repercuten en la mejor formación de los niños y jóvenes en etapas educativas especialmente las comprendidas en edades obligatorias. Cuando se pretende cambiar el modelo educativo, el sistema en su conjunto, se aborda su estructura, la organización del profesorado, las materias que deben desarrollarse; pero casi nunca se llega a una definición del curriculum que ofrezca respuestas validas y viables a las necesidades personales contextualizadas en el mundo.
Las mejores y más altas finalidades que se proponen para la educación, se quedan en nada si no se transforman en un curriculum accesible y universal para toda la población estudiantil. Las escuelas son los espacios donde se producen los hechos educativos y es ahí donde llegan las decisiones políticas y técnicas que sean necesarias para la mejora de la educación de lo contrario aunque se sigan haciendo reformas educativas estas no se llevan a cabo con la profundidad que exige el momento histórico actual ni la sociedad que las rodea. Mantenemos a pesar de los cambios modelos tradicionales de enseñanza en materias, asignaturas, áreas, campos de formación, incluso en etapas educativas tempranas lo que dificulta la comprensión del conocimiento al alumnado, continuamos con tipos de evaluación generalizadas que impiden la aplicación real de un curriculum flexible que atienda a cada niño y niña en función de sus capacidades personales.
Toda educación nos debe de dar la formación necesaria para desenvolvernos posteriormente en la vida, actualmente la educación corre el riesgo de dejar de preparar para la vida, meta que siempre se ha perseguido.
Todo curriculum debe ofrecer un planteamiento que responda a las necesidades de formación actual. El logro de la calidad adecuada de cada momento pasa por la consecución de un diseño curricular que ofrezca respuestas validas a los estudiantes para su vida y sociedad. Si esa deseada calidad no se traslada a un curriculum adecuado se queda en una mera declaración de buenas intensiones.
Para llevar a cabo estas acciones suelen opciones relativas a la duración de los niveles educativos, sus tipos de duración, las materias que comprenderán cada nivel, con su diseño curricular especifico, sus contenidos, la formación que precisa el profesorado, la especialización que se le exige para incorporarse al sistema, las funciones que desempeñaran las administraciones intermedias y sus mandos, el papel que jugara la dirección de los centros docentes y la inspección de educación, la intervención de los alumnos y de sus familias en el desarrollo y definición del funcionamiento de la enseñanza, los tipos de instituciones en las que tendrá lugar la educación, su organización básica, los documentos institucionales que regirán estas instituciones, son muchas las decisiones que se deben tomar para la puesta en marcha para la educación, o la mejora de la misma que es la mas habitual, mas aun en momentos de fuerte crisis como los que se padecen en muchos países. Para que en la educación no se mira la construcción de una sociedad equilibrada, un factor importante que esta influyendo en esta toma de decisiones es la evaluación basándose en la implementación de pruebas puntuales y escritas.
El diseño curricular supone una propuesta teórica practica de las experiencias de aprendizaje básicas, diversificadas e innovadoras, que la escuela en colaboración con su entorno deben ofrecer al alumnado para que consiga el máximo desarrollo de capacidades y dominio de competencias, que le permitan integrarse satisfactoriamente en su contexto logrando una sociedad democrática y equitativa, basándose en las necesidades de los alumnos, formándolos, educándolos y preparándolos para la vida.
BIBLIOGRAFIA: El diseño curricular como factor de calidad educativa. Reice. Revista iberoamericana sobre calidad, eficacia y cambio en educación, vol. 10, número 4, 2012, pp. 6-20 red iberoamericana de investigación sobre cambio y eficacia escolar.